EN EL OLVIDO EL CERESO MIXTO DE PAPANTLA

- Se encuentra sin elementos de seguridad que los resguarden.
- Carrera accidentada para su acceso.
- Habitantes de Gildardo Muñoz, inconformes por su construcción.

EFRAÍN PARRALES / PAPANTLA, VER.

En el abandono se encuentra la construcción del Centro de Readaptación Social Mixto ubicado en la comunidad de Gildardo Muñoz del municipio de Papantla, Veracruz. Entre la maleza del campo las instalaciones están abiertas y no cuentan con personal de vigilancia que resguarde el plantel.

A la entrada de la carretera, se puede observar un espectacular oxidado que dice: “Gobierno del Estado de Veracruz, Secretaría de Gobernación, Sisitema Nacional de Seguridad Pública. Construcción del CERESO MIXTO para 500 internos, con una inversión de 143 millones 995 mil 168 pesos. 11 de diciembre de 2000 a 11 de noviembre de 2001. En Gildardo Muñoz, municipio de Papantla.”

11 minutos aproximadamente es el trayecto que se debe de recorrer de la entrada del CERESO Mixto a dicho lugar. Para llegar este sitio se debe de pasar por las propiedades privadas “Rancho Linda Vista” y “Rancho Las Palmas” para después llegar a Gildardo Muñoz.

La carretera que lleva al Centro de Readaptación Social solo esta habilitada para dos carriles, uno de ida y otro de regreso, algunos baches hacen el camino mas largo, ya que para no dañar los automóviles la velocidad con la se conduce debe ser moderada.

Ismael López, quien vive frente a la entrada de la carretera a Gildardo Muñoz, dijo que ha escuchado varios comentarios sobre la creación de este lugar. “Algunos están a favor y otros en contra, pero la mayoría no esta de acuerdo, temen que algún día haya un enfrentamiento por el intento de rescate de un preso”

Son tres las casas que se encuentran durante el paso de los ranchos, según Ismael, es hasta la comunidad en donde existen cerca de 300 familias dispersas ya que es muy grande este lugar, además existe una escuela, una papelería, dos puentes y transitan por el camino, camionetas y camiones de carga de una compañía petrolera, además del transporte público.

La construcción del CERESO Mixto, para María Isabel Reyes, ha tenido un lado bueno y malo a la vez, pues a pesar de ser su casa la mas cercana a la construcción y estar temerosa de vivir cerca de 500 maleantes por otro lado también ha sido beneficiada al haber vendido al gobierno 30 metros de su terreno para el asfaltado y acceso vial del reclusorio.

- ¿Cuánto dinero le pagaron por los 30 metros?
- No te puedo decir, pero si estuvo bien pagado, a parte ya me dijeron que probablemente quieran un pedazo más de mi terreno.

De acuerdo con para María Isabel Reyes, quien lleva viviendo en Gildardo Muñoz, 19 años, las instalaciones del CERESO llevan ya mas de un año abandonadas, los trabajadores ya no volvieron y no hay nadie que cuide el lugar. Solo una puerta hecha de tela ciclón aparenta estar cerrada en el acceso principal, pero no hay candado ni vigilante que lo resguarde.

“Mucha gente de aquí y de fuera viene a meterse. No hacen nada malo, solo entran para conocer” dijo María Isabel.

Para ella, la desconfianza de los habitantes de Gildardo Muñoz va ser evidente cuando se ponga en funcionamiento el Centro de Readaptación Social Mixto, debido a que este lugar es tranquilo y sin problemas, dijo que no les parece la idea que “delicuentes pesados” estén cerca de sus casas. A parte de que aunado a esto, vendrán trabajadores y familiares de los reos y la comunidad no esta preparada con los servicios necesarios para recibirlos.

El CERESO MIXTO, tendrá la capacidad de albergar a 500 procesados y aunque no se sabe cuando terminara su construcción, las instalaciones se encuentran fuera de control y las personas que viven cerca de el, no están de acuerdo en su ubicación y viven con la incertidumbre de la seguridad de la comunidad del Gildardo Muñoz.